¿No puedes decidirte entre tanta variedad de secadores? El modelo, la potencia, los accesorios… te mostramos las 3 características principales que debes tener en cuenta a la hora de elegirlo.

1. El modelo

Si no puedes vivir sin el brushing, lo mejor es que elijas un secador profesional, que te garantizará un resultado rápido sin estropear tu melena. Este aparato difunde iones negativos que evitan la electricidad estática y limitan la sequedad de la fibra capilar. Además, es una inversión a largo plazo, porque es más resistente que los demás.

Otra característica importante es el formato del secador. Las versiones más pequeñas te resultarán muy prácticas si tienes el cabello corto y son muy fáciles de transportar en cualquier viaje. En cambio, te recomendamos un aparato de mayor tamaño si tu melena es larga y gruesa. Eso sí, intenta que sea lo bastante ligero, ya que realizar tantos gestos repetitivos podría cansarte.

2. La potencia

El secador debe ser eficaz para que seque el cabello lo más rápido posible. En el mercado encontrarás aparatos con una potencia de entre 1000 y 2300 vatios. Cuanto más grueso sea tu cabello, más potencia necesitarás. Además de este factor, la posibilidad de elegir diferentes temperaturas te permitirá adaptar el calor según el uso que vayas a darle. Lo mejor es que tu secador disponga de: un botón de aire caliente para alisar o secar rápidamente tu melena; un botón de aire frío, perfecto para fijar el movimiento que deseas darle; y una temperatura intermedia para secar ligeramente el cabello antes del peinado.

3. Los cabezales

Estos accesorios distribuyen óptimamente el calor para garantizar un resultado preciso y una protección reforzada. Para conseguir un brushing perfecto , lo mejor es que utilices una boquilla estrecha (concentrador de aire) que combine rapidez y precisión. Si no, puedes usar un difusor para secar tu melena. Este es un cabezal que reparte el calor con suavidad, protege el cabello estropeado, potencia el volumen y preserva la definición de los rizos.