Perfecto para transformar cualquier peinado, el efecto mojado es uno de los estilos a la última esta temporada. Te mostramos cómo conseguir un wet look a tu medida para combinarlo con un moño.

1. Crea un wet look que se adapte a ti

Por suerte, el efecto mojado se adapta a tus gustos y a cualquier ocasión. Si deseas un wet look total, trabaja tu cabello recién lavado y tras haber eliminado el exceso de agua, para potenciar el efecto de tus productos de peinado. Si, por el contrario, prefieres un resultado más sutil, texturiza tu melena cuando esté seca.

Con el cabello desenredado, calienta entre tus manos un poco de gel de fijación flexible, como el Design Gel de Jean Louis David; y termina repartiendo el producto de manera uniforme en todo el cabello. ¿Quieres un consejo para que tu look mojado sea todo un éxito? No te apliques demasiado gel en las raíces para no darles un aspecto graso, y úsalo también con moderación en las puntas. Después, desenreda tu melena con un cepillo para que los mechones se vuelvan más flexibles y facilitar así el peinado.

2. Elige tu moño en función tu estilo

Un moño tipo bun alto para un look cool, uno bajo a la altura de la nuca para un estilo muy elegante, o uno italiano para conseguir un aire roquero… el efecto mojado queda bien con cualquier recogido. Primero, hazte una raya en medio o al lado para darle movimiento al peinado y, después, recoge tu cabello y enróllalo sobre sí mismo para formar el moño. Para terminar, dale un toque de brillo con un poco de laca como acabado y, ¡estarás lista!