Apostar por un corte masculino, ponerse extensiones o, simplemente llevar un flequillo: descubre lo que esconden tus cambios de look.
Adoptar un peinado corto
¡Decidirse por un peinado bastante corto es un gesto radical que nada tiene de anodino! A menudo, esta elección llega en las etapas clave de la vida como respuesta a algunos acontecimientos que nos han marcado, ya sean tristes o felices. Las rupturas sentimentales o las promociones profesionales son un buen ejemplo de ello. En este caso, el corte sirve para pasar página y abrir un nuevo capítulo, que se traduce en la voluntad de convertirse en una mujer fuerte e independiente que sabe llevar las riendas. El cabello corto es signo de madurez y de una toma de postura porque, al adoptar un look andrógino, estarás mostrando que no te da miedo hacerte valer.
Dejarse el cabello largo
Por el contrario, dejarse el cabello largo o ponerse extensiones para lucir una melena XXL desvela más bien un deseo de gustar, y ganas de ternura y romanticismo. De hecho, este corte hace referencia a los peinados de la niña soñadora y sentimental que eras antes, y a la misma esencia de la feminidad. En cualquier caso, ¡el amor se palpa en el «hair»!
Cortarse el flequillo
Transformar tu corte con un flequillo recto que esconda la frente quiere decir que necesitas protegerte del exterior, poniendo una pequeña barrera entre tú y el resto del mundo. ¿Te has preguntado si no eres un poco tímida o introvertida últimamente?
