Seguro que has pensado en la coloración para disimular tus primeros mechones de color plata. Pero, ¿cuándo hay que empezar a teñirse las canas? Tenemos la respuesta.
Cuando sientas que es necesario
Ahora que las canas son tendencia y que se llevan con orgullo, apostar por la coloración ya no es algo «automático». Si te sientes cómoda con ellas, no necesitas teñirte; pero si tus primeras canas te molestan, lo mejor es que empieces a camuflarlas desde el principio. En tal caso, puedes adoptar una coloración tono sobre tono que se aproxime a tu color de base para disimular los mechones grisáceos sin que se note. Las coloraciones temporales también ofrecen un buen resultado, aunque más efímero. Y además existen otras soluciones, como los champús colorantes y, si eres rubia, los reflejos, con los que podrás uniformizar tu melena sin necesidad de hacerte un tinte completo.
Cuando tengas más del 50 % de canas
Si somos totalmente pragmáticos, el momento adecuado para empezar a utilizar una coloración permanente es cuando el cabello se vuelve verdaderamente gris, para no ofrecer un aspecto descuidado. Este tipo de tinte cubre más que el resto y es perfecto para dejar atrás las numerosas canas que le restan naturalidad a la base.
Cuando estés preparada para cuidar tu coloración
Disimular las canas también significa asumir los retoques regulares que el tinte implica, ya que las raíces se notarán aún más. Es un inconveniente que no debes tomar a la ligera si decides teñirte.