¿Sueñas con dejar a un lado el rubio para lucir un pelirrojo intenso? Pues no debes elegir una tonalidad cualquiera. Te mostramos todo lo que tienes que saber para adoptar el pelirrojo sin equivocarte.
Encuentra el pelirrojo que mejor se adapta a tu rubio
Aunque técnicamente puedes conseguir cualquier tipo de pelirrojo si tienes una base clara, no todos te sentarán bien. ¿Quieres saber cuál es el secreto para que la transformación sea todo un éxito? Escoger la tonalidad que más se aproxime a tu color natural, y el resultado será equilibrado. Si tienes el cabello rubio platino o bebé, apuesta por el rubio veneciano. Se trata del tono más claro del pelirrojo, un color que posee reflejos dorados y cobrizos muy suaves que no harán demasiado contraste con tu melena tan clara. En cambio, si tu base es de un color rubio oscuro, apuesta por un tono intenso como el pelirrojo irlandés, que contiene matices más anaranjados. Además, estás de enhorabuena: ¡el pelirrojo es el tono ideal para realzar la piel pálida o dorada de las rubias!
¿Qué técnica elijo?
Por suerte, el rubio es el fondo ideal para conseguir un pelirrojo bonito sin dañar el cabello En ese caso no necesitarás hacerte una decoloración, como ocurrirá si eres morena. Si deseas pasar del rubio claro al pelirrojo veneciano, unos simples reflejos serán suficientes para cambiar de color y sus mechas cobrizas se fundirán con tu base. Por el contrario, si tu rubio es oscuro, la coloración será la mejor opción. Apuesta por un tinte permanente si estás completamente segura o evita cualquier riesgo haciéndote una prueba con henna, que se va eliminando poco a poco.
