Cabello graso y grueso: mi rutina capilar

Aunque el cabello grueso tiende a ser seco, en algunos casos se engrasa rápidamente. Por suerte, este pequeño inconveniente no supone una fatalidad. Te mostramos los pasos adecuados que debes adoptar para mimar tu melena densa y grasa.

Al contrario de lo que puede pensarse, el grosor del cabello no basta para determinar su naturaleza. Una melena con volumen también puede combinar sequedad, falta de brillo, puntas abiertas, caspa… e incluso producir sebo en exceso. Si es tu caso, no te pierdas nuestra rutina capilar indicada para el cabello graso y grueso.

Purificar las raíces

Como el cabello graso está ligado a la hiperactividad de las glándulas sebáceas, es conveniente utilizar un champú purificante con propiedades astringentes y suavizantes, como el de la gama Control Therapy de Jean Louis David; un producto perfecto para regular la producción de sebo. No dudes en alternarlo con un champú suave para mantener el equilibrio del cuero cabelludo.

Reducir la temperatura del agua

El agua caliente suele agredir el cuero cabelludo y, como resultado, este produce aún más sebo para defenderse; un círculo vicioso con el que puedes acabar reduciendo la temperatura del agua de aclarado.

Desenredar la melena

El cabello grueso suele presentar nudos, así que es indispensable desenredarlo. Por ello, lo mejor es que utilices un acondicionador que no sea demasiado nutritivo para no aportarle pesadez a la materia capilar, y aplicar el tratamiento solamente en las puntas y medias puntas.

Optar por un secado al aire libre

Di adiós al secador, que tiene tendencia a potenciar el volumen, y apuesta por un secado al aire libre. Si tienes prisa, puedes seguir utilizándolo, siempre y cuando esté configurado a baja temperatura, para evitar que el cabello se hinche o que el cuero cabelludo se dañe.