Una coloración temporal es, tal y como indica su nombre, ¡temporal! Es decir, desaparece con el paso del tiempo evitándote el efecto raíces. Una coloración temporal termina desapareciendo por sí misma. Nos centramos en esta técnica.
 
Todos los peluqueros están de acuerdo en decir que una coloración temporal debe desaparecer con el paso del tiempo sin dejar restos de reflejos no deseados. «Todo depende de la coloración temporal que utilices. Las que venden en el supermercado suelen estar sobrecargadas para garantizar el color a las que las utilizan». Por ello, es mejor realizar tu coloración en la peluquería y así beneficiarte de los consejos de un profesional. 
 
En Jean Louis David el servicio de coloración temporal se llama Gloss. «Esta coloración aporta mucho brillo y permite trabajar fácilmente sobre los reflejos. La ventaja de esta técnica es que desaparece al cabo de 4 ó 5 semanas como un verdadero bronceado. Y no deja ningún reflejo no deseado». ¿Qué diferencia una coloración temporal profesional de una realizada a domicilio? «Generalmente los reflejos no desaparecen con una coloración de supermercado. Resultado: tu marrón puede terminar siendo marrón claro y tu dorado puede adquirir un aspecto más bien amarillo…».
 
En cualquier caso, ¡las coloraciones temporales son un gran éxito entre la clientela femenina! «Esta coloración puede  disimular hasta un 30% del cabello blanco. También puede interesar a las más y menos jóvenes que tengan ganas de cambiar de color de forma regular». Sobre todo porque las coloraciones temporales suelen aportar más brillo que una coloración permanente. «Tienen un toque transparente y disimulan menos, por lo que el resultado es muy bonito».
 
Nuestro truco: Las coloraciones temporales se cuidan igual que las permanentes. Por ello, es primordial utilizar champús y tratamientos destinados a cabello teñido. Esto permitirá que tu color dure más tiempo y conserve su brillo.
 
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