A menudo hablamos de las morenas que quieren pasarse al rubio pero, ¿qué hay del caso contrario? Descubre como pasar de un color a otro sin riesgos, acudiendo a un profesional de peluquería.
Debes saber que pasar de rubia a morena sensibiliza menos el cabello que la operación inversa. Excepto, claro está, si el cabello ya es frágil. Para evitar dañar tu cabello o lucir reflejos no deseados acude a
tu peluquería donde obtendrás un resultado a medida.
Tu peluquero, en primer lugar, preparará tu cabello con una precoloración. "Porque no se puede teñir directamente el cabello sin riesgos. Esta paso previo a la coloración permite que el color aguante mejor sobre el cabello y que no cambie con el paso del tiempo". Cuando el pelo esté listo, ya puede recibir el tinte. "Lo ideal es no optar por los extremos y guardar un color similar al de origen para un resultado muy natural. Al fin y al cabo, es más fácil obtener reflejos cálidos, como el marrón, que reflejos fríos".
Para que tu color permanezca bonito durante más tiempo, tienes que cuidarlo. En casa y en la peluquería. De vuelta a casa, utiliza
productos destinados a cabello teñido, especialmente champús y mascarillas. "Partes de una coloración más clara por lo que para que el nuevo color aguante sobre tu cabello estos productos son básicos. Úsalos para que el color no destiña al cabo de unas pocas semanas".
¡Tampoco te olvides de tu peluquero! Acude a tu peluquería todos los meses para devolver los reflejos a tu color. "Para ello no es necesario volver a realizar la coloración. Podemos, por ejemplo, realizar un
Gloss, simplemente para reavivar los reflejos". Si tu coloración contrasta con tu color natural tendrás que tratar tus raíces cada 4 ó 6 semanas.
Nuestro truco: En Jean Louis David los productos utilizados para preteñir el cabello son sin amoniaco. Lo ideal para evitar agredir y dañar el cabello. Así, apuesta por las
coloraciones sin amoniaco en la medida de lo posible para un cabello lleno de salud.