Independientemente de si es natural o teñido, el cabello tiende a estropearse y a aclararse, y la coloración pierde intensidad por el efecto de los rayos UV. Que no cunda el pánico: existen soluciones para remediarlo.
Una rutina reforzada para reestructurar el cabello
¿Tu melena se ha llenado de reflejos más claros por el efecto del sol pero se ha quedado muy reseca? En tal caso, debes adoptar un cuidado de choque para reforzar tu cabello. Utiliza un champú rico en activos hidratantes seguido de una mascarilla con queratina, que regenera la fibra en profundidad para que tu melena recupere toda su vitalidad.
Completa el ritual usando un tratamiento sin aclarado al salir de la ducha para un plus de cuidado, y hazte un baño de aceite a la semana para alisar la cutícula del cabello y que los activos reparadores se mantengan en el interior de la fibra.
Un cuidado inteligente para corregir el color
¿Tu color natural se ha vuelto apagado a causa del sol? Pues apuesta por el cuidado potenciador de color de Jean Louis David específico para tu tono de base. Su fórmula con pigmentos que reavivan el color es perfecta para aportarle dinamismo al cabello. Por el contrario, si tu coloración contiene algunos reflejos de un tono amarillo anaranjado a causa de los rayos UV, lo mejor es que uses un champú morado. Así, sus pigmentos correctores eliminarán los matices no deseados.
Una visita a la peluquería para reparar los daños
¿El desastre capilar se palpa?, ¿tu melena está muy apagada y tu coloración se ha estropeado? Pues confía en tu peluquero para encontrar la solución que mejor se adapte a ti. En algunas ocasiones, con un tratamiento profesional, con una coloración tono sobre tono, con un Gloss o, simplemente, con añadir un matiz, se pueden hacer milagros.
