No hay nada mejor que unos rizos voluminosos llenos de glamur y sensualidad para transformar tu peinado. ¿Tienes el cabello muy liso y no sabes cómo obtener este efecto? Te mostramos tres métodos infalibles.

Las tenacillas para las que tienen prisa

Las tenacillas son muy fáciles de usar y permiten crear unos rizos bonitos rápidamente. Para conseguirlos, empieza aplicando un espray termoprotector para proteger tu melena del calor y después enrolla cada mechón por separado en el aparato. Cuando hayas terminado, pásate los dedos por el cabello para romper el efecto estático de las ondas y, por último, fija tu melena con un poco de espray de fijación.

Los bigudíes para las más pacientes

Se acabaron los moldeados de los años 80; hoy en día los rulos dibujan movimientos vaporosos en el cabello y no lo debilitan con temperaturas extremas. Aunque el proceso para lograrlos es más lento que con un aparato de calor, los bigudíes harán que tu peinado se mantenga durante más tiempo. Es una buena razón para sucumbir a este accesorio, sobre todo porque algunos modelos más flexibles han sido especialmente creados para usarlos por la noche. Así, tu cabello se ondulará poco a poco mientras tienes dulces sueños.

La permanente para las más decididas

La permanente es la solución más radical y consiste en rizarse el cabello de forma duradera. Aunque se usa cada vez menos, esta técnica ha vuelto y lo ha hecho de una manera menos abrasiva y más natural que antes. Además, es muy práctica para las que están cansadas de rizar su melena cada mañana. Para obtener este efecto, se enrolla el cabello en los rulos y se utiliza un producto de fijación en la zona donde se quiere aplicar el movimiento. El efecto rizado está garantizado durante dos y tres meses.

El truco para conseguir unos rizos XXL: tanto si sueles usar las tenacillas como si prefieres los bigudíes, elige siempre un aparato de peinado con un diámetro ancho.