¡Cambio de temporada, cambio capilar! Con la llegada del frío, muchas chicas quieren cambiar el corte de su cabello, o al menos el color de éste. La mayoría opta por un color a la última, aunque hay algunas que no saben cómo elegir su nueva coloración. Analizamos, en detalle, los criterios que hay que tener en cuenta cuando decidimos cambiar el color de nuestra melena.
Al cambiar tu coloración, lo más importante es no elegir un color completamente opuesto. “
Pasar de rubia a morena o de
morena a rubia es una tarea extremadamente difícil. Es más fácil intentar darse un color algunos tonos más oscuros que el que llevamos, pero sin pasarse. Por ejemplo, aquellas chicas que tengan el cabello rubio podrán atreverse con una coloración marrón o marrón oscuro. Recordad siempre que pasar de un tono a su opuesto es tan difícil como intentar volver a nuestro color natural”.
Es muy difícil elegir cuando no se tiene una idea definida sobre el color que se quiere conseguir. “Muchas veces os ocurrirá que vuestro
peluquero os recomiende una determinada coloración que a vosotras no os convence. ¡No lo dudéis! Id a la peluquería con fotos de famosas o personas que os inspiren y cuyos colores de pelo os gusten”.
La elección del color y el tono de piel: ¡no hay reglas! “Muchas chicas se sorprenden, a menudo, cuando elijen una coloración que “según las normas” no es compatible con su color de piel. Muchas tienen la piel muy pálida y no se atreven con los colores oscuros, aunque en algunos casos se ha demostrado que queda estupendamente. Lo mismo ocurre con las mujeres con la piel más morena, que no se atreven con los tonos claros en su melena. Cuando lo hacen, ¡consiguen un resultado magnífico!”.
Nuestro truco: Este invierno lo que se lleva en Jean Louis David es la
tendencia Lift Color. Si tú también quieres adoptar esta tendencia, recuerda que es necesario tener distintos tonos en tu pelo. La base tiene que ser oscura para aportarle un toque de relieve al corte.
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